viernes, 18 de enero de 2008

Sick Sad World

Reflexiones de fin de semana

Tengo la costumbre de ir observando al mundo mientras manejo, voy en el camión, taxi o de pasajero en cualquier tipo de transporte, me agrada ver a la gente que va manejando en los autos contiguos. A veces les sonrío, y a veces me corresponden, aunque no la mayoría de las veces. Cada persona es un mundo diferente y me pregunto que historia habrá detrás de esos individuos con quien me topo azarosamente en mi día a día. Llantos, alegrías, amores y desamores, muerte, nacimientos, riqueza, pobreza. Somos nuestras experiencias y nuestra memoria; sin ellas no seriamos nadie pues vivimos, somos y nos comportamos con base en los paradigmas impresos y reforzados en el vivir diario desde el día en que nacimos.

Estrés, trabajo y las ocupaciones diarias a veces nos tienen tan ocupados que no nos detenemos a pensar en lo que se oculta detrás de los entes anónimos que constantemente nos rodean. Y me pregunto, cuál será la historia que rodea a las personas que a continuación pondré, de este mundo triste y enfermo que ha inyectado su veneno ponzoñoso en nuestras almas. El infierno si existe, y está aquí en la tierra, junto a ti en cada momento y en cada lugar, basta quitarnos la cortina que nos hemos auto impuesto y detenerse a observar.

Un par de niños de 3 y 7 años, se encontraban ahí sentados, solos en espera de su camión entre humo y suciedad.


Un señor ahí meditabundo, triste, acabado, probablemente después de haber utilizado el último centavo en un billete de lotería que nunca ganó, o tal vez simplemente ebrio llegará a golpeara su mujer.


Un Pepenador caminando con unos trozos de plástico. Recogía todo material reciclable que pudiera intercambiar por unos cuantos pesos para comprar un bolillo. Señores, si tienen latas de refresco o cerveza, no las tiren en la basura, bótenlas en la calle, así le darán de comer a alguien, ténganlo por seguro.


Y no se necesita ser pobre para vivir una experiencia de vida terrorífica, he aquí la prueba:


Efectivamente, no necesitas vivir en el “pecado” para ir al infierno dantesco de las religiones judeo-cristianas; este se encuentra aquí en la tierra.

Ah y tampoco se necesita vivir en la represión y azotarte para purgar tu alma para así ganar el cielo cada vez que uno despierta con una saludable erección matutina. El cielo también está aquí en la tierra, y tengo la prueba a continuación:


Buen fin de semana.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Pero porque todas las imágenes deben referirse a tragedias o tristezas?
La verdad es que en todas las vidas existe una fuente inagotable de sonrisas y alegrías. He sido testigo de gente que en las circunstancias más adversas es capaz de reír y sonreír. Dale una oportunidad a la alegría...

Unknown dijo...

Bueno,dependiendo del estado de ánimo es como vemos las cosas. Tal vez hoy veo todo trágicamnte y mañana con la luz de un nuevo día,vea un mundo feliz y lleno de armonía....
Me gustaron las reflexiones...